Estimados lectores:
Debo confesar que empecé esta lectura con
un gran prejuicio. La autora, Kerri Maniscalco, escribió una de mis series
favoritas, A la caza de Jack El Destripador y me era
imposible entrar con cero expectativas.
Como ustedes sabrán, el tener muy altas las expectativas es un
arma de doble filo; tenemos mucha motivación para leer, pero también seremos
mucho más críticos.
La sinopsis dice mucho de la trama, pero
se los resumo en mi palabra: Hace muchos años, en Palermo, Italia, en un mundo
en el que las brujas se han escondido entre los humanos para evitar ser
perseguidas; la abuela de Vittoria y Emilia, gemelas, siempre les ha recalcado
que hay ciertas prácticas ocultas en las que no se debe participar, demonios
que debían evitar. Vittoria, la rebelde, siempre ha puesto a prueba los límites;
Emilia, en cambio, siempre ha querido una vida normal.
Cuando empiezan a morir jóvenes brujas,
todos sospechan de los cazadores de brujas, pero cuando Emilia encuentra a
Vittoria brutalmente asesinada y sin su corazón, emprenderá la búsqueda del asesino
a lado de uno de los príncipes que justamente debía temer.
Este libro me ha generado un torbellino
de emociones; temor, intriga, tristeza… todo se mezcla para hacer un libro que
me ha fascinado más de lo que me imaginé, y se ha vuelto mi favorito de
fantasía de los últimos que he leído.
Por un lado, Emilia lucha con el duelo de perder a su gemela. Su vida ha cambiado irrevocablemente, y una repentina sed de venganza sin importar las consecuencias la invade.
Por otro, Wrath,
uno de los príncipes del infierno y representante del pecado capital de la Ira,
busca librar al diablo, su hermano, de una maldición que lo aqueja desde hace
mucho.
La interacción de la relación amor-odio es fuego puro. No he leído un mejor Enemies-to-lovers hasta el momento.
La autora maneja de una manera magnífica los
sentimientos del lector conforme avanzan los capítulos: ¿amamos a Wrath? ¿lo
odiamos? Vacilamos entre las dos junto con la protagonista y la seguimos
conforme se van desvelando secretos y clarificando motivaciones.
La intriga es magistral, la tensión entre
Wrath y Emilia es inigualable y todo el libro me tuvo superenganchada de inicio
a fin. El ritmo está muy bien equilibrado entre los momentos de suspenso y las
reflexiones de Emilia.
No me queda duda de que seré para siempre
fanática de la obra de Kerri Maniscalco, increíblemente superó “A la caza de
Jack el destripador”, si bien son distintos. La enorme habilidad de esta
escritora para volvernos adictos a la historia, de crear personajes muy reales,
humanos (aunque no lo sean, como en este caso, ustedes me entienden).
Sufrí junto a Emilia, quise matar también
a Wrath, y me estremecí terriblemente en esas escenas de casi-terror con seres
demoniacos. Este libro lo tiene todo. TODO, les digo.
¿Sobra decir que me gustó el libro,
verdad?
No es spoiler decirles que el segundo lo
leí en dos días y medio, que me gustó incluso más que este y que si no leen
esta serie se van a arrepentir.
SE VAN A ARREPENTIR, LES DIGO. VAYAN A COMPRARLO.
¡Hasta pronto!
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