Estimados
lectores:
El día de hoy
les traigo un libro de no ficción, de esos que no solamente entretienen, sino
que también nos nutren, mental y espiritualmente y nos ayudan a centrarnos
cuando es necesario u orientarnos para reacomodar nuestras prioridades.
En este caso, a
través de seis relatos, podremos adentrarnos a diferentes aspectos de una
felicidad integral, conoceremos a los seis portadores de los Cinturones Mágicos
que, una vez reunidos, revelan un secreto de la felicidad (tranquilos, que después
del primer relato viene la primera intervención donde nos es explicado esto a
detalle).
Con estos
relatos coloridos y con tintes fantásticos podremos extraer grandes enseñanzas
que, nadie podrá negar, son básicas para mejorar la calidad espiritual de
nuestra vida.
Las historias
son muy fáciles de leer por su simplicidad de lenguaje y bastante entretenidas,
lo que las hace ideales para todo tipo de público, ya sean lectores habituales
u ocasionales. Les comparto de qué va cada relato y una frase que llamó mi
atención, para no arruinarles el punto de la lectura.
En el primer relato veremos a Cairo, un
pequeño egipcio, miembro de la tribu de los twara, con unos valores firmes y
que, por medio de relatos de sus padres, obtiene grandes enseñanzas que no
dejarán indiferentes a los lectores, y que lo convierte en uno de los
portadores
«Cairo, hay dos maneras de comunicarse con las
personas: lo puedes hacer desde el amor o desde el ego. Y este último solo es
un reflejo del miedo. Utiliza tu comunicación con las personas para mejorarte.
Utiliza la claridad de los espejos humanos para observarte y analizarte. Siente
las emociones y presta atención a tus pensamientos. Te darán informaciones que
no tienen precio.»
El segundo, una niña namibia llamada
Windhoek, que se presenta como una neurocirujana, abandonada por sus padres
pero que es adoptada por un “niño-adulto” llamado Orange. De aquí aprenderemos
como preparar a nuestro cerebro y como hackearlo.
De los que me resultó más interesante:
«Orange me contó que, mucho tiempo atrás, un
psicólogo llamado Fritz Strack realizó este peculiar estudio. En él demostraba
que, al colocar un lápiz de esa misma manera en la boca, se obtenían los mismos
beneficios que cuando nos reímos. Enseguida me di cuenta de que Orange había
jaqueado mi cerebro por completo»
El tercero, un niño español llamado
Madrid que aprende acerca de las percepciones, las creencias, miedos y hábitos.
«…toda persona percibe el mundo de una manera distinta.
Cada ser humano vive su propia realidad, su propia verdad, vive en su propio
mundo. Todos vemos cosas diferentes y creemos cosas distintas.»
En el cuarto relato conoceremos a un niño
llamado París que conoce el secreto del éxito.
«París, en la vida hay dos tipos de personas. Los
primeros viven su vida haciendo aquello que aman; son los que aportan algo a la
humanidad, los que transmiten su pasión. Estos son movidos por una motivación
intrínseca que está muy por encima de su persona. Todo lo que hacen lo hacen
por una razón que los deja a ellos mismos en un segundo plano. Una razón que es
mucho más grande que ellos; algo transcendental. Los segundos no aportan
ninguna plusvalía a la humanidad. Viven la vida que les ha tocado vivir y no la
que quieren. Así que pregúntate siempre: ¿qué tipo de persona eres?»
En el quinto era un niño llamado Tokio,
que nos enseña del liderazgo, siendo un gurú en varios temas desde pequeño,
especialmente aprenderemos respecto a como leer a las personas y como influir
en ellas. Este portado es distinto porque se conforma de un equipo de niños que
lideraba Tokio.
«Si partimos de la premisa de que la esencia de la
vida es ser feliz, entonces podríamos decir que las personas más inteligentes
son las personas más felices. Por lo tanto, la inteligencia es nuestra capacidad
de entender y resolver problemas con el fin de ser más felices.
En el último relato conoceremos al último
de los portadores, una pequeña niña llamada Bogotá, que nos ayudará a conocer
un poco más acerca de los miedos.
«Nuestra mente pensante es experta en manipulación,
al igual que los niños. Ella no quiere aceptar que hay algo de nuestra vida
actual que no nos conviene, algo que va mal.»
En general, me pareció un libro bastante
valioso, bien documentado y que vale la pena leer y releer en esos momentos en
que necesitamos retormar la dirección de nuestra vida y regresar a las partes más
valiosas y básicas de nuestro ser.
Una excelente lectura que no tiene
desperdicio y que disfruté muchísimo.
¡Hasta pronto!
¡Hola! He visto varias reseñas de esta novela y aunque el hilo central sí que me llama, la verdad es que este tipo de novelas de autoayuda no son santo de mi devoción, así que en esta ocasión prefiero dejarlo pasar.
ResponderBorrar¡Nos leemos!
¡Hola! Me encantó la reseña y a decir verdad nunca había visto este libro anteriormente pero me lo he apuntado porque lo necesito. Qué bien se siente tener libros que no solo te nutren por fuera, sino espiritualmente también.
ResponderBorrarMe alegra que te gustase tanto.
Un abrazo enorme.
Nos leemos.