«Al principio, Dios creó una criatura maravillosa. Pura, inmortal y perfecta... Pero al mirarla, supo que también era monstruosa, así que la partió en dos.»
Estimados lectores:
El día de hoy les traigo la reseña de un
libro de fantasía oscura, mezclado con suspenso y toques de terror, escrito por
una joven mexicana, Mariana Palova.
Esta es la segunda entrega de «La nación
de las bestias», cuyo primer libro fue autopublicado en Amazon Kindle en 2017.
En 2019, el libro saltó hacia el mundo editorial, de la mano de Editorial
Océano de México. Esto es una continuación de los sucesos narrados en el primer
libro, «El señor del Sabath», por lo que en caso de que NO hayan leído el
primer libro, les recomiendo que chequen primero mi reseña AQUÍ para evitar spoilers, aunque mantengo bastante reservados mis comentarios de la
trama para que no se les arruine la historia. Lo que sí les puedo adelantar es
que es un libro que vale muchísimo la pena, especialmente para los fanáticos de
la fantasía.
No les puedo decir la emoción que sentí
al enterarme que la editorial iba a organizar una lectura conjunta de este
libro, el primero me dejó profundamente enganchada, y tenía tantas, tantas
ganas de continuar con los personajes que inmediatamente quise unirme.
Cuando lees un libro que disfrutaste, y
sale la secuela, inmediatamente te emocionas, es inevitable. Lo que sí varía es
el resultado, ya que entras a una historia con grandes expectativas,
esperando que sea igual de bueno que el anterior, y a veces, juega en contra.
Me ha pasado con otras series, que se volvieron más lentas, menos interesantes.
Pero definitivamente no fue lo que pasó con La nación de las bestias.
A pesar de su extensión (608 páginas,
para ser exactos), leí este libro en 4 días. Tomando en cuenta que dos de esos
días leí un 15% y los otros dos el 85% restante, puedo asegurarles que lo
único que me detuvo fue el tiempo que tenía disponible.
A diferencia del libro anterior, que tenía uno que otro capítulo que te permitían apaciguar la emoción, este fue pura adrenalina. Pasamos de suceso en suceso hasta que sobrepasar los límites del pobre Elisse, pero que nos deja invariablemente prendados de la trama.
Tenemos escenas oscuras, algunas profundamente perturbadoras, pero creadas con una destreza impresionante que conecta las letras de Mariana Palova directo a nuestro cerebro, activando nuestra imaginación como solo una excelente historia puede hacerlo.
Debo aclarar que no soy una fanática del
terror, es quizás el que menos he visitado de los géneros literarios, desde
hace años, por lo que algunos capítulos me provocaron imágenes fuertes, pero
resultaron muy estimulantes e interesantes, y me dejaron comiéndome las uñas
del suspenso. Como pueden ver, incluso una cobarde como yo puede meterse en la
historia, sufrir y disfrutarlo al mismo tiempo.
Al igual que en la primera historia, en
esta ocasión se repite la fórmula del narrador misterioso, aunque no resulta
ser el mismo que en el libro pasado. Esto me encantó y me pareció muy
acertado en esta historia también, puesto que todo el resto del libro lo
tenemos en primera persona desde los ojos de Elisse, así que este segundo
narrador enriquece la experiencia de la lectura.
En general, la narración tiene una
calidad inmejorable, me pareció más emocionante que «El señor del Sabath» y con
mayor ritmo, y eso que aquel libro me fascinó en su momento. Mariana Palova se
lució en esta historia, que no solamente complementa y continúa la historia de
Elisse, sino que la sobrepasó y me dejó muerta de ganas de leer la siguiente
entrega.
¡SE LOS RECOMIENDO!
Hola, quiero empezar a leer el primer libro pero aun no me hago a la idea. Es un libro bastante interesante pero aun necesito un empujoncito. Gracias por la reseña.Besos
ResponderBorrar¡Hola!
ResponderBorrarSabía que por algo se me hacia familiar la portada jeje, que padre que te haya gustado la historia, debo de aceptar que he leído la reseña muy por encima pues no me quería llevar un spoiler jeje.
¡Un beso!