Chicas de papel y de fuego - Natasha Ngan

Cada año, eligen a ocho chicas hermosas que servirán al rey como Chicas de Papel. Es el más alto honor al que pueden aspirar… y a la vez, el más degradante. Este año hay una novena chica.

Y en lugar de papel, está hecha de fuego.

Lei pertenece a la casta de papel, la clase más baja de Ikhara. A pesar de eso, un rumor sobre sus ojos dorados ha despertado la curiosidad del rey; por eso, la apartan de su hogar y la llevan al opulento palacio, una prisión dorada, y su vida queda sometida a los caprichos del Rey Demonio.

Mientras sueña con escapar, Lei comete lo impensable: se enamora.

Su romance prohibido, entretejido con una trama explosiva que amenaza al mismísimo rey, va a obligar a Lei a decidir hasta dónde está dispuesta a llegar en su lucha por la libertad.

Exótica, poética y absolutamente inolvidable, Chicas de papel y de fuego es una historia extraordinaria que nos recuerda que el amor puro y la pasión pueden trascender incluso el destino más desalentador.

📚 Autor: Natasha Ngan

📚 Editorial: Puck (Urano)

📚 ISBN: 978-84-92918-63-8

📚 Formato: Pasta blanda, digital

📚 Páginas: 416

📚 De venta en: Amazon

Estimados lectores:

Hoy les traigo un libro de fantasía juvenil con una temática juvenil, pero que aborda temas sensibles e importantes.

Este libro sigue la historia de Lei en un mundo en el que existen tres castas: la casta de papel, los humanos ordinarios; la casta de acero, los que tienen rasgos de algún animal, pero mantienen su forma humana; y la casta de la luna, los demonios puros.

 Como podrán adivinar, la casta de la luna es la que predomina en el mundo creado por Ngan, el reino Ikhara, pues son los más poderosos, los que se encuentran cerca del cielo, casi dioses (sus palabras, no mías). En gran contraste, los humanos resultan frágiles, débiles, tan fáciles de romper como el papel.

 

Siguiendo una antigua tradición, el Rey Demonio selecciona a 8 chicas de la casta de papel para ser sus concubinas por un año, ampliamente conocidas como «las chicas de papel». Para muchas familias humanas, esto representa un gran honor, pues la selección viene con un gran premio económico. Para Lei, es una pesadilla que debe revivir cuando la buscan específicamente por sus dorados ojos, algo considerado una rareza entre la casta de papel, convirtiéndola en la número 9.

Durante su preparación, Lei se encuentra resignada a su suerte, con tal de mantener a salvo a su familia. Eso, hasta que llega su turno de pasar una noche con el rey. Mientras todo esto sucede, Lei se enamora de otra de las chicas de papel. Sobra decir que es algo completamente prohibido.

 

Como pueden ver, este libro tiene una temática fantástica juvenil, innovando de cierta forma al introducir a un personaje no-blanco de la comunidad LGBTI+ como protagonista, aunque esto no forma parte predominante de la historia, sino que se introduce como un rasgo más de Lei.

Es una novela que nos habla de disparidades entre clases sociales, discriminación entre razas y especies, pero también de un mundo de injusticias y violencia hacia la mujer. En general, representa una clásica historia de un reinado de terror que termina agotando la paciencia de la gente.

 

Disfruté la historia por su originalidad, por ver qué resultaría de Lei y los demás personajes. Tiene un buen ritmo y nos mantiene con la intriga de muchos temas, aunque muchos quedaron como cabos sueltos a resolver en la segunda entrega de esta serie. Se sale de los esquemas preestablecidos en cuanto a la ambientación y características físicas de los personajes, pues parece estar ubicado en el continente asiático.

 

Sin embargo—y dirán, ahí viene el «pero»—, me hubiera gustado que la autora hubiera explotado un poco más de tonalidades en los personajes, ya que los malos terminaron resultando muy malos, sin cualidades redimibles, mientras que los buenos son panecitos dulces y desinteresados. No es algo que me eche totalmente para atrás, pero me hubiera gustado ver un poco de esos matices en el Rey Demonio, por ejemplo. Lo muestran como fuerte, rudo, guapo, pero un hijo de la tostada que te hace odiarlo, lo que no está mal, precisamente, solo que resulta menos fácil de digerir.

 

Por otro lado, Lei, la típica protagonista linda, pero torpe. No es precisamente fuerte físicamente, pero de alguna forma todo se le perdona por esos ojos tan raros y bonitos que tiene (*es sarcasmo*). Honestamente, me gustó más el personaje de Wren, que tiene una personalidad más fuerte y definida.

 

Nada de esto es algo que noté inicialmente mientras leía el libro, pues lo disfruté bastante y estoy más que dispuesta a continuar la historia, pero me pareció uno de sus puntos débiles y que espero mejore en el segundo libro.

Aún así, es una historia muy original, aborda temas importantes como la diversidad, discriminación y la autonomía sexual, y definitivamente le gustará a todo fanático de las series fantásticas.

 

¡Me la pasé bien leyéndolo y lo recomiendo ampliamente!