Birdie Lindberg, aficionada a los libros de misterio, tiene una imaginación desbordante.
Sus abuelos la criaron en soledad y la educaron en su casa, por lo que ha cultivado una inusual vida de fantasía en la que ella adopta el papel de una detective heroica y cada extraño se convierte en un sospechoso.
Pero su mundo solitario se expande cuando consigue un trabajo de verano, en el turno de noche de un histórico hotel de Seattle.
En su nuevo trabajo, Birdie espera dejar de ser una soñadora introvertida y transformarse en una emprendedora valiente, y el amistoso
Daniel Aoki se ofrece como voluntario para convertirse en su guía. El carismático chófer del hotel comparte el mismo turno con Birdie y frecuenta la misma cafetería costera: Moonlight, donde Birdie espera el primer ferri de la mañana después del trabajo. Daniel también comparte su gusto por la intriga, y él se ha topado con un misterio en la vida real: un famoso escritor huraño —que nunca aparece en público— quizás esté quedando en secreto con alguien en el hotel.
Para descubrir la identidad enigmática del escritor, Birdie deberá salir de su cascarón… y descubrir que el misterio más complejo de todos quizás sean los sentimientos que Daniel, un acertijo en sí mismo, está despertando en su vida.
📚 Autor: Jenn Bennett
📚 Editorial: Puck (Urano México)
📚 ISBN: 9788492918577
📚 Formato: Pasta blanda, Digital
📚 Páginas: 416
Estimados lectores:
El día de hoy les traigo un libro
romántico juvenil que seguramente les arrancará muchos suspiros.
Como habrán visto por el título de esta
reseña, se llama “Encuéntrame en Moonlight” y sigue la historia de Birdie, una chica dulce que fue educada en su
casa por sus abuelos, tras la muerte prematura de su madre. Ahora, tras la
muerte de su abuela, Birdie busca encontrar su camino trabajando en un hotel en
el turno nocturno, pero se topa con la persona que menos esperaba y quería ver.
Daniel Aoki es un chico al
que Birdie conoce en un café, e impulsivamente tiene un encuentro “amoroso” con
él, pero sale huyendo de inmediato, colmada de vergüenza por haberse atrevido a
involucrarse con un chico sin conocerlo. Coincidentemente, Daniel trabaja en el
mismo hotel como chofer, en el mismo horario. Al reconocer a Birdie, Daniel la
tienta con un misterio de detectives acerca de un escritor que ha preferido
permanecer anónimo.
Juntos, compartirán esta aventura
detectivesca, y mientras más se acercan y conocen, menos será la distancia que
Birdie ha decidido mantener entre ellos.
Bueno, pues debo decir que al comenzar a
leer, las personalidades poco comunes de Birdie y Daniel me costaron unas
cuantas páginas de aclimatación, pero después de un tiempo, les tomé mucho
cariño, justo por estas grandes diferencias que los alejan de los clichés de
las novelas románticas juveniles.
Ambos adolescentes cargan su propio equipaje
emocional; Birdie, por un lado, lidia con la pérdida de su madre, la
ausencia y desconocimiento de su padre, y un problema de narcolepsia que afecta
su vida normal; Daniel, por el otro, lidia con su problema de audición en un oído
y su padre ausente de su vida. Esto
enriquece de gran manera la historia y permite a los lectores empatizar mucho
con estos dos personajes.
No puedo decir que en la cuestión del
romance haya sido excelente, pero es que, a pesar de insinuar encuentros
sexuales entre ambos, el amor entre Daniel y Birdie es muy tierno e inocente.
La historia no tiene como primer plano la relación entre nuestros protagonistas,
sino su crecimiento como individuos y su habilidad para afrontar sus propias
cargas. Vale la pena mencionar que Daniel Aoki no es nuestro típico galan
de novela romántica, para empezar por su look, pero esto se olvida con rapidez,
pues es un chico dulce y bienintencionado.
La historia fluye muy bien, nos centramos
mucho en el misterio del famoso escritor, y eso también ayuda a que el ritmo no
decaiga nunca. Me acabé el libro en una semana completa, por cuestiones de
tiempo, pero fácilmente podría haberme sentado una tarde completa y leerlo en
unas horas.
Este libro tiene un mensaje esperanzador
para todos aquellos jóvenes diferentes, con algún tipo de discapacidad, con
problemas familiares o con una vida complicada. Existe la posibilidad de superarlo,
de sobreponerse a los retos que la vida nos ha impuesto y de encontrar nuestro
camino, cuando nos lo proponemos.
Birdie aprendió a aceptar su condición y
las limitaciones que conlleva, con Daniel como ejemplo. Aprendió a dejar entrar
a una persona nueva a su vida y a su corazón, a pesar de lo que pasó con la
pérdida de su madre y abuela.
En cuanto a Daniel, no conocemos a tanta profundidad sus pensamientos, ya que la
historia se narra en primera persona desde la perspectiva de Birdie, pero por las
interacciones con ella, su pasado ha sido duro, pero lo ha superado. Me dejó
muy aliviada que dejaran los asuntos serios en manos de especialistas, y que no
atribuyeran todo a la gran capacidad de los personajes. Nuevamente, un gran
mensaje para los jóvenes: pedir ayuda cuando se necesita.
Tenemos a pocos personajes secundarios, pero
destaco a la mejor amiga de la mamá de Birdie, Mona, una mujer alocada y
extravagante, pero que se vuelve un apoyo emocional para ella. Me gustó el
personaje mucho, aunque por momentos parecía un poco caricaturizado, si bien su
función en la historia no es principal, por lo que no hubo oportunidad de
desarrollarlo mejor.
En general, todo el libro me dejó con una
sensación muy agradable, me permitió cerrarlo con una sonrisa y creo que es un
libro que no solamente entretiene, sino que se vuelve un ejemplo de superación personal.
¡Lo recomiendo mucho!
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