¡Nunca es demasiado pronto para hablar con los niños sobre cosas serias! Porque una verdadera «buena educación» que hable no sólo de reglas, sino también de emotividad, de lucha contra los prejuicios y de rotura de estereotipos como los de género debe comenzar lo antes posible.
Este libro está diseñado y editado por Irene Biemmi, experta en educación de género e igualdad, y tiene como objetivo sensibilizar a las familias y las escuelas sobre la cultura de género desde una edad temprana: de hecho, es a partir de los primeros años de vida cuando empezamos a transmitir, incluso inconscientemente, los estereotipos sobre «lo que hacen las mujeres y lo que hacen los hombres». El mensaje que contiene es muy simple: papás y mamás… ¡hacen lo mismo!
¡2 libros en 1! La solución en papel de este libro permite abrir simultáneamente la página dedicada a los papás y la página correspondiente dedicada a las mamás. Una forma aún más eficaz de hacer que la gente piense en… ¡igualdad!
📚 Autor: Irene Biemmi
📚 Editorial: Picarona
📚 ISBN: 9788491452522
📚 Formato: Pasta dura
📚 Páginas: 20
Estimados lectores:
Me ha encantado ver cómo el tema de equidad de género está inundando los libros infantiles. Este año me ha tocado leer con mis niños varios, y este libro, muy enfocado a romper los estereotipos en el ámbito doméstico y familiar complementa perfectamente esta pequeña colección que he formado.
¿Por qué es importante comenzar a hablar de equidad de género en la niñez?
De acuerdo a la CONAVIM, la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres, para alcanzar la igualdad sustantiva entre hombres y mujeres y lograr la erradicación de la violencia contra ellas, es necesario impulsar políticas públicas y modelos educativos con perspectiva de género desde la educación básica.
Según la investigadora María Amparo Rosa Torres, los roles de género se construyen tan temprano como a los dos años de edad, por medio de observación, imitación y refuerzo. Por lo tanto, es indispensable que se comience a plantear la idea de la equidad de género desde pequeños. ¿Cómo? Con el ejemplo. Evitemos lenguaje poco incluyente (y no me refiero al todes), expresiones sexistas o algo que encasille a los géneros.
Papás y mamás de las sociedades occidentales históricamente han tenido roles muy definidos que se deben cumplir para mantener esa construcción social que en estas épocas intentamos romper.
Antes, las mamás tenían todas las funciones del hogar de mantenimiento y cuidado de los niños. Los papás, en cambio, salían por el sustento y regresaban a casa a jugar un ratito con los pequeños. Esto era forzoso para ambas partes, por lo que no existía ningún tipo de diversidad en los papeles que desempeñaban los padres, y los niños crecían con esa misma visión, haciendo un círculo vicioso eterno que se transmitía de generación en generación.
Pero no me extenderé más, les dejo un artículo que habla más de este tema.
Ya en lo particular, este precioso librito es una herramienta perfecta para comenzar esta conversación con los pequeños. Mamá y papá pueden hacer lo mismo. En algunas familias, los roles serán los tradicionales. En otras, podrán ser invertidos. La tendencia actual es que ambos trabajen, y en ese caso, la repartición de tareas debería ser dividida equitativamente.
Mamá hace el desayuno, papá hace el desayuno; mamá hace fiestas de cumpleaños, papá también. Mamá conduce, papá también. Todas esas ideas al final llegan a la misma conclusión: mamá y papá son iguales.
Otro de los atractivos del libro es la inusual forma de lectura, puesto que el libro se encuentra literalmente dividido por la mitad, una de mamá y otra de papá, para que los niños puedan ver paralelamente las mismas actividades siendo realizadas por cada uno de sus padres.
Es un libro que inmediatamente llama la atención de los pequeños, en mi caso fue así. Los colores vivos, dibujos animados atractivos, la historia sencilla y la creativa forma de leerla hacen que los pequeños sientan curiosidad por leerlo. Quizás, en algunos casos resultará algo normal, especialmente en familias con tareas divididas equitativamente, pero en otros ayudará a demostrar que, cualquiera que sea la modalidad o forma de la familia, ambos sexos pueden hacer las mismas cosas, sin demérito a la hombría de uno, ni con algún tipo de prejuicio en el otro.
Un libro que me encantó como madre trabajadora, y con una tendencia que debemos seguir en libros infantiles, si queremos que nuestros hijos crezcan siendo personas seguras de sí mismos, y con libertad de poder hacer lo que deseen, sin temor al «qué dirán» de la sociedad, pues la sociedad idealmente tendrá la mente abierta y sin prejuicios.
Indispensable para nuestro librero familiar.
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