Canción de Navidad - Charles Dickens

El viejo Scrooge es un brillante hombre de negocios y un avaro incorregible. La víspera de Navidad recibe la visita del fantasma de su viejo compañero de negocios y amigo Jacob Marley. Marley ha vuelto del más allá para advertir a su amigo de lo que le espera si no cambia de vida y le anuncia la visita de los espíritus de las Navidades pasadas, presentes y futuras. Con cada uno de ellos, Scrooge aprenderá una inolvidable lección.

Autor	Charles Dickens
Editorial:	Varias
ISBN	9788415597490
Formato	Papel y Digital
Páginas	120-160  (depende de la edición)
De venta en:	Amazon Gandhi Gratuito en inglés

Estimados lectores:

En el mes de diciembre participé en una lectura conjunta como parte del Colectivo Lectores Rebeldes, pero lamentablemente los cierres laborales y las fiestas decembrinas hicieron que no pudiera acabar hasta el día de hoy, pero hoy les traigo esta lectura que es indispensable para la época navideña.

Debo confesar que es mi primera vez leyendo esta corta historia de Charles Dickens, si bien en varias ocasiones he visto las adaptaciones cinematográficas de la historia de Ebenezer Scrooge. Para los que no conocen la historia, les traigo un pequeño recuento:

Ebenezer Scrooge es un anciano tacaño, avaricioso y cruel, que vive por y para ganar más dinero. El único amigo que tenía, su socio Jacob Marley, murió sin que esto tampoco impactara en su rutina. Se dice, incluso, que el mismo día del entierro Scrooge siguió haciendo negocios como si nada.

Su corazón es tan duro y frío, que ni siquiera la época navideña consigue conmoverlo. Su único empleado Bob Cratchit, su sobrino y otros personajes de su vida lo conocen y se han resignado a su amargura, pero no dejan de intentar suavizarlo.

En la víspera del día de Navidad, Scrooge recibe la espeluznante visita de su socio fallecido, Jacob Marley, que como un espíritu errante visita a su viejo amigo para advertirle de la penitencia que ha tenido que cumplir por su mal comportamiento en vida, advirtiendo a Scrooge que sigue el mismo camino, y solo le pudo conseguir una oportunidad de salvarse recibiendo la visita de tres espíritus.

Reacio, pero temeroso, acepta las visitas, en las cuales Scrooge visitará su pasado, su presente y su futuro. Lo que sigue tienen que descubrirlo.

El lenguaje que se maneja dependerá mucho del traductor de la obra, pero en sí Dickens en su versión original deleita con la sencillez y calidez de su relato, que se encuentra en segunda persona. Al dirigirse directamente al lector, Dickens logra una empatía inigualable, ya que no nos mete de lleno en la lógica de actuar de Scrooge, sino que nos lo platica como alguien que conoce sus pensamientos, pero no los comparte. Existe crítica directa hacia algunas acciones de Scrooge, mientras que alabanzas para otros personajes.

Lo que puedo decirles de esta historia es que es ideal para leer en cualquier momento, ya que aunque se sitúa durante la navidad, los grandes temas que trata, como el arrepentimiento, la compasión y redención son universales y atemporales.

Debo decir que, aunque me atrasé bastante en este libro, siento que lo leí en el momento indicado, ya que en una época de cambios personales, me hizo replantear mis prioridades y contar mis múltiples bendiciones. 

Como Scrooge, cualquier persona que se ciegue a lo que tiene alrededor puede caer en los extremos del egoísmo, quizás no con el dinero, sino con lo que podemos aportar. 

Este libro ensalza la labor de servicio hacia los demás como principal propósito de nuestra existencia. Incluso, como la visita al pasado del joven aprendiz Scrooge, con poca cosa podemos contribuir a mejorar o alegrar la vida de alguien más, y eso puede ser la gran diferencia entre la felicidad y la tristeza, incluso entre la vida y la muerte.

Lo único que quizás, para mí, hubiera mejorado esta excelente obra, es que al momento de "regresar" y la redención de Scrooge es muy breve. Claro, el libro se enfoca en lo que hicimos y hacemos, y lo que puede provocar, pero hubiera sido dulce conocer el trato de Scrooge con su escribiente y con Tiny Tim.

En conclusión, este gran clásico es indispensable en nuestra biblioteca, y uno que debemos releer iniciando el mes de diciembre, ya que seguramente endulzará nuestras reuniones familiares y nos hará valorar lo que tenemos, en vez de ansiar lo que carecemos.

¡Hasta pronto!