Te dije que no la tocaras más - Olga Salar (2018)

La vida de Darcy Lauren da un giro de ciento ochenta grados el día que toma la decisión de divorciarse. A pesar de tener las cosas claras y de la rapidez con la que retoma su vida, su capacidad para crear historias de amor se ve mermada por ese desengaño que le ha roto el corazón. 

Buscando reencontrarse con las musas, se esconde en el pequeño pueblo de Irlanda de donde procede su familia y se topa con que las traviesas divinidades, en un intento por restituir su inspiración, le han enviado a la única persona que puede devolvérsela. 

Autor	Olga Salar
Editorial:	Autopublicado
ASIN	B07F6FNCX5
Formato	Digital y Tapa blanda
Páginas	257
De venta en:	Amazon

¿Qué les puedo decir? La semana antepasada comencé este libro con el otro que reseñé el lunes, y también me atrasé con este. La cosa es que tuve una semana complicada y no podía avanzar porque no tenía tiempo. Aclaro esto porque no puedo calcular qué tanto influyó esta situación en mi opinión del libro, aunque según leí en Goodreads, no fue algo poco común.

Sumado a esto, ya había leído otro libro de esta escritora llamado Íntimos enemigos, y me encantó, así que tenía bastantes expectativas comenzando la lectura.

Terminado mi disclaimer, comienzo por explicar un poco acerca del libro.

La historia toma lugar en Termonfeckin, Irlanda, una ciudad que por lo que investigué en google, es idílica y tranquila. He aquí unas foto para que me vean qué curiosa. 

Pues el asunto es que es una ciudad muy tranquila  y el lugar ideal para que Darcy se recuperara de su feo divorcio de Sidney─un auténtico patán─ y terminara su última novela.

 Darcy y su familia provenían de esa ciudad, y ahí se encuentran sus dos mejores amigas, Fiona y Caitlyn, pero lo que ha perdido por completo es la inspiración. Sidney acabó con su fe en los hombres y el romance, y Kellan ─el galán de la historia, músico famoso y vecino de Darcy─, aparece como caído del cielo.

La historia tiene mucho potencial. La idea, aunque no es novedosa en el mundo de los Chick-Lit, da mucha tela de donde cortar. El punto aquí es que me parece que al igual que Darcy, Olga Salar perdió la inspiración por la mitad del libro. Arrancó bien, los primeros capítulos me engancharon, pero después de unos cuantos más, perdió impulso, el llamado momentum. 

Aunque fue entretenida, en esta ocasión siento que la escritora contó la historia muy por encima, o pasó demasiado tiempo tratando de definir la personalidad de los personajes, que le hizo falta jugar con los momentos de tensión, escenas románticas, algo de chispa, un poco más de ese "plus" que sí está en el otro libro de ella que he leído. 

Me parece que fue algo completamente apurado, quizás para participar en el Premio Amazon de este año, pero es una lástima porque con unos toquecitos para desarrollar un poco más la la historia, meterle más romance y la chispa que tiene la pluma de esta escritoria, hubiera resultado fabulosa. Me hubieran gustado menos estereotipos, pero realmente no me importan tanto si la historia es emocionante y cautivadora.

¿Lo disfruté? Sí, por supuesto. Es una historia bonita, sencilla y reconfortante, ideal para una tarde lluviosa para leer mientras comemos unos chocolates. Peeeero no recomendaría leer este libro si no se ha leído otro de la escritora aún. Tiene una larga trayectoria en el mismo género, y por supuesto que intentaré con otro de sus libros. Les mantendré informados 😉.

¡Hasta pronto!